OLIVOS DEL BÚRDALO

Entre vastas extensiones de olivares varietales, regadas por las aguas del río Búrdalo, se encuentra nuestra almazara. Un lugar donde se alinean depósitos, donde el aceite reposa y se enriquece con matices sutiles. El ambiente se llena de cautivadores aromas y promete experiencias gustativas inolvidables.

En su corazón, late un tesoro dorado cuidadosamente elaborado en sus depósitos, protegido por sus compañeros líquidos. Es allí donde obtenemos nuestro aceite más exclusivo. Como una joya líquida, se decanta lentamente, dejando atrás impurezas y revelando su esencia impecable.

Mientras los depósitos son el epicentro de esta danza armoniosa, los demás aceites forman un círculo protector a su alrededor. Cada uno cuenta su propia historia, llevando consigo el carácter y la personalidad de la tierra de donde provienen. Algunos aceites son intensos y robustos, mientras que otros son suaves y delicados, evocando la dulzura de las aceitunas maduras y las flores de primavera.